Carta para mi papá en el día del padre.
Como representación de mi afecto, amor y voluntad, a ese alguien que siempre he amado, mi papá.
No sé qué se siente escuchar por primera vez ¨papᨠo ¨mamá¨, o ver a tu hijo caminar con la actitud de triunfador, esa que va a tener toda la vida, porque tú se la enseñaste. No sé que se siente sentarte a su lado y mostrarle las letras, esas letras que años más tarde va a utilizar para escribir, para escribirte una carta, esas cartas que recibes en un día como hoy.
Hay muchas cosas que no sé, que no puedo entender y que no lo haré hasta que llegue el momento. Pero de lo que si estoy segura es que ser padre es el regalo más maravilloso de la vida. Es un gran trabajo, porque no importa que tanto hagas siempre dudas si hiciste lo suficiente; no importa que tanto te prepares, nunca te sientes completamente preparado; No importa que tanto des, siempre cabe la duda de si falto, y si das mucho la duda de haberle dado demasiado. Pero es así, es complicado, es complicado porque tienes en tus manos la responsabilidad más grande que se te haya presentado.
Por otro lado si sé qué se siente ser hija, qué se siente saber que hay alguien a tu lado para recogerte después de una caída; que hay alguien que reza por tí todas las noches; que te pregunta las tablas de multiplicar antes de dormir; que te agarra de la mano y te muestra playas y museos; que te cuenta las historias más asombrosas, que te hace creer en un ratoncito que recoge tus dientes en la noche, en un monstruo que se come los salchichones de la nevera, en un ángel que te visita una vez por semana. Sé qué se siente escuchar en la calle su nombre y responder con una gran sonrisa: si, ese es mi papá.
Y todo eso, todo lo que te dió, todo el amor, el sacrificio, el tiempo, el cariño, las enseñanzas, son cosas que nunca vas a poder agradecer, porque son las cosas que te hicieron, que te hicieron la persona que eres hoy.
A los padres, y muy en especial al mío quiero decirles que no se preocupen, que hacen un buen trabajo, porque lo hacen con corazón, con ganas, con empeño; y no importa la edad, los hijos nos damos cuenta de eso. Gracias por brindarnos tanto tiempo de sus vidas, por cada palabra de amor, por cada abrazo, por cada lección, por cada valor, por mostrarnos el mundo, por pensar en nosotros primero que en ustedes, por enseñarnos cómo debemos ser con nuestros hijos y por darnos la luz de la vida porque no importa lo que hagamos de aquí adelante nos dio la oportunidad de conocerlos.
A mi tío Kiki, con su chispa que alegra a todos y que tiene a los hijos más inteligentes q conozco; a mis primos Moisés y David, que a pesar de haber sido padres muy jóvenes hicieron y hacen un trabajo increíble; a mi hermano, que se desvive por su hija como nadie en este mundo; a Alex que me abrió las puertas de su casa y me adopto como una hija más, a mis abuelos que sé me acompañan día y noche, y por supuesto a mi papá centro de mi universo, y dueño de mi alma…
Les deseo el mejor de los días, los quiero muuuucho!!!! Debbie Akinin
Como representación de mi afecto, amor y voluntad, a ese alguien que siempre he amado, mi papá.
No sé qué se siente escuchar por primera vez ¨papᨠo ¨mamá¨, o ver a tu hijo caminar con la actitud de triunfador, esa que va a tener toda la vida, porque tú se la enseñaste. No sé que se siente sentarte a su lado y mostrarle las letras, esas letras que años más tarde va a utilizar para escribir, para escribirte una carta, esas cartas que recibes en un día como hoy.
Hay muchas cosas que no sé, que no puedo entender y que no lo haré hasta que llegue el momento. Pero de lo que si estoy segura es que ser padre es el regalo más maravilloso de la vida. Es un gran trabajo, porque no importa que tanto hagas siempre dudas si hiciste lo suficiente; no importa que tanto te prepares, nunca te sientes completamente preparado; No importa que tanto des, siempre cabe la duda de si falto, y si das mucho la duda de haberle dado demasiado. Pero es así, es complicado, es complicado porque tienes en tus manos la responsabilidad más grande que se te haya presentado.
Por otro lado si sé qué se siente ser hija, qué se siente saber que hay alguien a tu lado para recogerte después de una caída; que hay alguien que reza por tí todas las noches; que te pregunta las tablas de multiplicar antes de dormir; que te agarra de la mano y te muestra playas y museos; que te cuenta las historias más asombrosas, que te hace creer en un ratoncito que recoge tus dientes en la noche, en un monstruo que se come los salchichones de la nevera, en un ángel que te visita una vez por semana. Sé qué se siente escuchar en la calle su nombre y responder con una gran sonrisa: si, ese es mi papá.
Y todo eso, todo lo que te dió, todo el amor, el sacrificio, el tiempo, el cariño, las enseñanzas, son cosas que nunca vas a poder agradecer, porque son las cosas que te hicieron, que te hicieron la persona que eres hoy.
A los padres, y muy en especial al mío quiero decirles que no se preocupen, que hacen un buen trabajo, porque lo hacen con corazón, con ganas, con empeño; y no importa la edad, los hijos nos damos cuenta de eso. Gracias por brindarnos tanto tiempo de sus vidas, por cada palabra de amor, por cada abrazo, por cada lección, por cada valor, por mostrarnos el mundo, por pensar en nosotros primero que en ustedes, por enseñarnos cómo debemos ser con nuestros hijos y por darnos la luz de la vida porque no importa lo que hagamos de aquí adelante nos dio la oportunidad de conocerlos.
A mi tío Kiki, con su chispa que alegra a todos y que tiene a los hijos más inteligentes q conozco; a mis primos Moisés y David, que a pesar de haber sido padres muy jóvenes hicieron y hacen un trabajo increíble; a mi hermano, que se desvive por su hija como nadie en este mundo; a Alex que me abrió las puertas de su casa y me adopto como una hija más, a mis abuelos que sé me acompañan día y noche, y por supuesto a mi papá centro de mi universo, y dueño de mi alma…
Les deseo el mejor de los días, los quiero muuuucho!!!! Debbie Akinin
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